La anunciada bajada de temperaturas empeorará las condiciones de quienes pernoctan en la calle ante la negativa de los propietarios a alquilarles pisos

Los responsables de Jaén Acoge lamentan que, un año más, las personas temporeras migrantes que acuden a la recogida de la aceituna se encuentren en situaciones de alojamiento precarias agravadas en esta ocasión por la alerta sanitaria derivada de la pandemia provocada por la COVID19. A la obligada reducción de plazas ofertadas en los albergues y el importante recorte presupuestario de la Junta de Andalucía que ha empujado a algunas de estas instalaciones a no abrir sus puertas, se une la negativa de muchos propietarios de pisos a alquilar sus inmuebles al colectivo de personas temporeras migrantes por lo que la situación de muchos de ellos es insostenible. De las 656 plazas disponibles en los albergues durante la campaña del año pasado, en esta ocasión el colectivo cuenta sólo con 390 plazas.

“Es inhumano mantener a estas personas en la calle y su realidad puede empeorar con la bajada de las temperaturas anunciada para los próximos días”, señala Naima  Belfakir El-Yajizi presidenta de Jaén Acoge. “Apelamos a las administraciones para que encuentren soluciones que terminen con una situación que se repite año tras año sin que los actores principales, entre los que se encuentran también las cooperativas y los empresarios agrícolas, diseñen un dispositivo definitivo y funcional para no encontrarnos cada campaña con el mismo problema”, explica Belfakir El Yajizi.

El punto de información de Jaén Acoge en la Estación de Autobuses de la capital atiende, algunos días, hasta a 90 personas temporeras que necesitan información sobre la disponibilidad de plazas en los albergues de toda la provincia, las coberturas del sistema sanitario, los desplazamientos para la búsqueda de empleo, las bolsas de trabajo disponibles y la ubicación de otros puntos de información en la provincia. Sin Embargo, el mayor problema se encuentra en el alojamiento donde se ha detectado ya la existencia de mafias que hacinan a los  trabajadores en los pisos, les retiran el pasaporte y les obligan a entregar parte de su salario bajo amenazas.

Desde Jaén Acoge se realiza un llamamiento a la ciudadanía para que se conciencie ante esta situación y facilite a las personas temporeras migrantes pisos en régimen de alquiler para contribuir a eliminar las prácticas fraudulentas de las que son víctimas estos trabajadores. Por otra parte, desde esta organización se solicita a las administraciones responsables de los albergues que flexibilicen los requisitos para el alojamiento nocturno ya que, para que los usuarios puedan realizarse la prueba PCR obligatoria, deben inscribirse durante la mañana por lo que aquellos que llegan durante la tarde no pueden acceder a las instalaciones  y tienen que pernoctar en la calle.

Con la apertura hoy del albergue de Andújar, son ya once los alojamientos que han abierto sus puertas para dar cobijo a los miles de temporeros que se desplazan a Jaén durante la campaña de la recogida de aceituna. El pasado año el número de instalaciones disponibles fue de 18 y, esta reducción unida a las restricciones impuestas por la pandemia sobre las plazas ofertadas en cada uno de ellos, dibuja un panorama preocupante en cuanto a las condiciones de vida de este colectivo que cada vez encuentra más dificultades para realizar su trabajo en unas condiciones dignas.  

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