Es una parte fundamental a lo largo de toda la intervención, representando una oportunidad para el aprendizaje, el cambio y la mejora, implicando a todos los/as agentes que han intervenido directa o indirectamente. La evaluación se realiza en tres momentos: antes de iniciar el proyecto (diagnóstica), durante la ejecución (formativa) y al final de la ejecución (sumativa). Para poder medir el progreso de las metas propuestas se deberán de marcar una serie de indicadores de evaluación. Los cuales deberán de reunir las siguientes condiciones: ser cuantitativos o cualitativos, específicos, medibles (registrables y contrastables), cuantificables (la característica tiene que ser cuantificable en términos de grado, porcentaje o frecuencia), orientados a la acción para permitir la reformulación, relevantes (aportar resultados significativos y representativos), operativos en el tiempo, coherentes con los objetivos e incluir fuentes de verificación específicas.
Sin comentarios para "Evaluación"